
Pero la crisis actual no solo es económica, tenemos problemas ecológicos tan graves que se estima que dentro de 100 años tendremos islas entera sumergidas bajo las aguas de los océanos, por culpa del calentamiento global. Especies completas se extinguen a diario. Los recursos de nuestro planeta se agotan. El índice de pobreza está aumentando a un ritmo alarmante. Las enfermedades que antes eran sencillas, ahora han evolucionado y se han convertido en amenazas globales. Los políticos cada vez se muestran menos capaces y nuestros gobernantes son cada vez más corruptos.
Ante tal panorama las personas se preguntan ¿Dónde está Dios? Si, ¿dónde está?, porque si existe, parece que no le importamos. Esta es una declaración que a cualquier cristiano debería parecerle una ofensa. Sin embargo, para mi esta declaración representa un reto, un desafío. Y es que si las personas no ven a Dios actuar en medio de todo este caos, es porque los hombres que Él ha levantado no han actuado.
Si piensan que Dios es injusto, es porque los cristianos están callados cuando se comete injusticia en alguna parte del mundo. Si dicen que Dios se ha olvidado de los pobres, es porque los cristianos han olvidado la capacidad de extender sus manos y dar un plato de comida al necesitado. Si dicen que Dios es sordo y ciego, es porque algún creyente cerró la puerta de su casa a un afligido, o porque algún gran Reverendo no entendió su papel de siervo y compartió una hora con un enfermo. Si dicen que Dios no existe, es porque su iglesia ha estado caminando por encima de las aguas, cuando la situación actual demanda que se sumerja en medio del caos y presente el rayo de esperanza que tanto se necesita en medio de esta densa oscuridad.
Ya basta ver los domingos como pasarelas de moda creados para lucir nuestros mejores trajes. Ya basta de nuestras guerras internas que están robándose el tiempo que debemos emplear en mostrar la luz de Cristo. Ya basta de atacar argumentos con más argumentos, cuando deberíamos estar afuera defendiéndolos con lo que hacemos.
En medio de las crisis históricas siempre hemos escuchado la voz Dios, que proclama "necesito un hombre". Esa misma declaración se escucha hoy Dios dice necesito un hombre, uno que se levante y proclame que la solución a la crisis está en mi, un hombre que pregone que la única salida es el Evangelio de Jesucristo, un hombre que entienda que la Gran Comision es más importante que su visión personal, un hombre que sea los pies y las manos de Dios.
Así cuando las personas se pregunten ¿Dónde está Dios en medio de todo esto? La iglesia pueda levantar sus manos y responder, aquí estamos haciendo el trabajo que El nos encomendó.
“Necesitamos hombres ardiendo al rojo vivo, que irradien el fuego con tan intenso calor; que no podamos siquiera acercarnos sin sentir que nuestros corazones se están quemando; hombres como relámpagos lanzados de la misma mano de Jehová, despedazando estrepitosamente cada cosa que se opone en su camino, hasta que lleguen a su blanco : Hombres impulsados por la Omnipotencia ! ”
Charles H. Spurgeon (1834-1892)
yo he buscado entre esa gente a alguien que haga algo en favor del país y que interceda ante mí para que yo no los destruya, pero no lo he encontrado.
Ezequiel 22:30 (Dios Habla Hoy)

pastor gemuel ese articulo estamuy ministrante.
ResponderEliminares poderoso y biblico,debedia ser como el lemade una iglesia con proposito, es muy estimulante, lo voy a imprimri enalgun momento y loo enmarcare para ponerlo como cuadro en mi casa y asi todas las visitas y mi familia lo use como lema de accion,como el espiritu de su cristianismo.
Gracias al Pastor Gemuel que nos da este articulo fesco. Se que muchos seran ministrados por el.
ResponderEliminarEspero que el Señor siga bendiciendo el intelecto y el Espíritu para dar agua fresca.
ES imposible leer este articulo y seguir igual.
ResponderEliminares muy desafiante y estimulante a entrar en accion en la expancion del evangelio.
muy interesante tien razon en lo que me dijo que si leia el primer parrafo iba a querer eguir leyendo el segundo lol
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